Capitulo 14

Ahora Caín está sentado solo en un sofá del salón del Castillo Real.

Al otro lado de la puerta, están las criadas que trabajan para el Castillo Real.

No entendía por qué hacían esperar en esta habitación a un niño de cinco años.

Antes, aparecieron unos cuantos mayordomos y criadas que inmediatamente le desnudaron, midieron sus tallas y le vistieron con nuevos ropajes aristocráticos.

Como era de esperar, la ropa de viaje, incluso la de los aristócratas, no era la adecuada para una audiencia con el rey.

Sin duda, esta vez Caín derrotó a los treinta orcos y rescató a la princesa y a la señorita Seda.

Estaba seguro de que los caballeros se habían enterado de la situación.

Cuando pensaba en ello, llamaron a la puerta y entró un mayordomo.

"Cain-sama, el Rey está listo para verlo, así que por favor prepárese en consecuencia".

"Oh, eso... Ni siquiera sé qué hacer en esta situación". Caín estaba en conflicto.

"Sin duda, es raro tener una audiencia con el rey a la edad de cinco años. Una vez que hayas entrado en la sala, ve derecho y pon una rodilla en la alfombra, pon una de tus manos en el pecho y baja la cabeza. Creo que eso debería bastar, ya que el rey es quien ha solicitado tu presencia", le dio algunos consejos el mayordomo.

"Gracias".

Caín dio las gracias al mayordomo.

"Vámonos."

Atravesaron el pasillo y se pararon frente a la gran puerta.

La puerta se abrió, y el mayordomo y Caín se adelantaron. A la izquierda y a la derecha, había personas que parecían ser nobles. Por supuesto, Garm también estaba allí.

Caín se dirigió al extremo de la alfombra, se dobló sobre una rodilla, se puso una mano en el pecho y bajó la cabeza.

"Levanta la cabeza".

La voz de Su Majestad se oye desde el frente.

Caín levantó la cabeza como se le dijo. Allí pudo ver a Su Majestad sentado en el trono frente a él y a la Reina y al príncipe y la princesa reales de pie a su alrededor. Por supuesto, también estaba la tercera princesa Telestia. Teles sonrió al ver a Caín.

Su Majestad tenía un aspecto imponente; en el trono, ataviado con sus ropajes reales. Parecía estar entrando en la cuarentena y tenía un cuerpo bien definido y una larga barba.

De un lado, salió una persona de pelo gris, de unos cincuenta años. Parecía ser el primer ministro del que Caín había oído hablar.

"Esta vez, la princesa Telestia y la señorita Seda von Santana fueron atacadas por una bandada de cincuenta orcos".

Los aristócratas que estaban ocupados charlando entre sí se quedaron estupefactos ante la noticia.

"En ese momento, el mismo Cain von Sylford saltó a la escena y sometió a treinta orcos él solo. Y escoltó a la princesa y a la señorita Seda de vuelta a la capital".

Al oír que treinta orcos fueron derrotados solos por un muchacho tan pequeño, los nobles a lo largo de la línea zumbaron como abejas.

"Como forma de gratitud, Su Majestad ha decidido otorgarle una medalla y el rango de barón."(TN: Copié esta línea del manga)

Después de que el ministro terminara la explicación, el Rey habló: "Caín von Sylford, esta vez, tu hazaña es digna de alabanza. Sin usted, no habría habido nadie que ayudara aquí a Telestea y a la señorita Seda. Además, le daré diez monedas de platino y una mansión en la capital".

Los aristócratas volvieron a hacer ruidos, y esta vez más fuertes.

Un noble salió de entre la multitud y se enfrentó, mientras su gordo cuerpo temblaba.

"Por favor, espere, Majestad. Incluso si sus hazañas son dignas de una medalla, pero a la edad de cinco años, todavía es sólo un niño ".
Una persona parece ser lo contrario. No, para ser honesto, yo también tenía ganas de rechazar, ya que no sé qué hacer con un título nobiliario.

"Marqués Corzino, en caso de que se enfrente a la misma situación, ¿puede saltar a la escena solo y derrotar a treinta orcos?" Preguntó el Rey.

"No, pero..."

A pesar de estar asustado, el marqués seguía oponiéndose.

"Cain von Sylford es el tercer hijo de su familia. Tiene pocas posibilidades de heredar el título de su padre. ¿Cómo puedo dejar que tal talento pase desapercibido? Esta decisión no cambiará". El Rey se mostró resuelto.

El marqués Corzino volvió a las filas de los nobles, mientras sus ojos se clavaban en Caín.

"Caín von Sylford, ¿aceptas la recompensa?". Preguntó entonces el Rey, mirando fijamente a Caín.

Me asusta la mirada del rey.

Cain vio la cara del Primer Ministro que estaba a su lado.

Ntl a mi también me cae mal el  marque corgino
H

El Primer Ministro instó en silencio a Caín a aceptarlo.

También vio la cara de Garm de pie al otro lado.

Del mismo modo, guardó silencio, pero su rostro también instaba a Caín a hacer lo mismo.

Caín respondió tras respirar hondo.

"Estoy agradecido a su majestad... lo aceptaré con mucho gusto".

El ambiente no permitía una negativa, y menos por parte de Caín, que sólo tenía diez años.

"Esto pone fin a la audiencia. Su Majestad se retirará".

Después de esas palabras, Su Majestad salió y la familia real lo siguió.

"Los detalles de su recompensa serán explicados en una habitación separada", dijo el Primer Ministro.

Caín también salió, indicado por el Primer Ministro. Las criadas habían alineado las mesas y sillas de la sala para que pudieran sentarse diez personas.

Mientras Caín esperaba en la sala, el padre de Caín dijo: "Mientras te esperaba, me contaron los planes para convertirte en barón. Sin embargo, nunca esperé que también te concedieran una propiedad. Estoy muy orgulloso de ti, Caín".

Acarició la cabeza de Caín mientras lo decía.

Mientras las dos personas hablaban, la puerta se abrió y varias personas entraron en la habitación.

El que llegó primero fue Su Majestad, y luego la reina, el primer ministro, la princesa Telestia, la persona que parece ser el padre de la señorita Seda y la señorita Seda.

Seda agitó las manos mientras sonreía mirando a Caín.

En una situación como esta, en la que el nivel superior del país está en pleno apogeo, mover el cuerpo no es tarea fácil.

El rey se sentó en la silla del medio.

"Todos, no estemos tan tensos. Sentaos".

Siguiendo su palabra, todos empezaron a sentarse.

Caín se sentó cara a cara con Su Majestad.

"Bien, en primer lugar, Caín, muchas gracias por tu ayuda. Me enteré de tu hazaña por Telestia".

El rey inclinó la cabeza. La reina también se inclinó al enterarse de su hazaña.

"Caín, yo también te doy las gracias, soy el padre de Seda, Eric von Santana Malpeque. Muchas gracias por ayudar a Seda".

El Duque también se inclinó.

"Su Majestad, la Reina, el Duque, por favor levanten la cabeza. Sólo vi que necesitaban ayuda e hice lo que pude para ayudarles. No hay necesidad de tanta gratitud".

El Rey, la Reina y el Duque levantaron la cabeza.

"Gracias. Pero me gustaría daros las gracias como padre, no como Rey. Ahora entonces, continuemos."

"¿Estás seguro de que quieres conceder a un niño de cinco años una propiedad propia?"

TN: ok así que arranqué esto del manga completamente ya que parecía raro).

Garm preguntó a su majestad.

"Sí, Garm. Escuché la historia de Telestia, mientras que sólo tiene diez años, con sus habilidades en la magia, la esgrima, y por no hablar de su caja de objetos, con tales habilidades, no sería beneficioso para el país dejar tal talento solo."

Su Majestad sonrió a Caín.

Sin querer, a Caín le corrían sudores fríos por la espalda.

"Como Caín es todavía un niño, no tendrá responsabilidades reales. Y viendo que aún no ha ido a la escuela. Yo también pagaré el mantenimiento de la mansión. Si tienes algo que quieras preguntar sobre la nobleza, pregúntale a Garm".

"Gracias. Hablaré con mi padre".

"Hay una historia más importante que esa."

El Rey puso cara seria y sus ojos se encontraron con los del Duque Eric como si se estuvieran preguntando mutuamente

Caín, espero que también te lleves bien con mi Telestia y con la hija de Eric, Seda. Por supuesto, el matrimonio formal sólo será después de la edad adulta, así que por ahora, ¿qué tal si os establecemos como prometidos?".

¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡"" !!!!!!!!!!!! ""

Garm estaba atónito. Por supuesto, Caín también lo estaba.

Miré a Telestia y a Seda, pero ambas tenían la cara roja.

"...Así que, eso es lo que... pero, su Majestad, ¿por qué?"

"Cain, hmm, ¿pero creía que habías aceptado sus insinuaciones? Tanto dentro del carruaje como en la posada del camino".

Cain recordó en su cabeza lo que pasó en el carruaje.

Seguramente en el carruaje, la princesa y la señorita Seda estaban sentadas a su lado con los brazos cruzados.

En cuanto a la posada, se quedaron en la misma habitación, porque él se rindió a la princesa Telestia, que tenía una voluntad fuerte, así que dividieron la cama y durmieron juntos en la misma habitación.

Caín pensó que estaba bien, ya que dormían en una cama diferente y sólo tenían cinco años, por lo que no debería haber ningún problema.

"Si una mujer soltera durmiera en la misma habitación que el hombre soltero y montara también en el carruaje, entonces tendría sentido que fueran a casarse, ¿no? ¿O podría ser que sólo estuvieras jugando con los sentimientos de nuestras hijas? "(TN Me gusta mucho esta frase del manga. PR: ¡A mí también 😂!):

Su Majestad le dijo a Caín. Combinado con la presión silenciosa del Duque y enfrentándose a un ataque a dos bandas, Caín no tenía forma de luchar.

Caín no sabía si la familia real era tan dura.

Sin saber qué hacer, Caín se volvió hacia el Primer Ministro. El ministro no dijo una palabra y se limitó a desviar la mirada.

"...Lo entiendo, pero por favor, dale prioridad a cómo se siente la princesa Telestia y la señorita Silk".

Ambos sonreían con la cara roja, tapándose la boca y los ojos llenos de lágrimas.

Caín tenía ahora dos prometidas a los cinco años.

Fin del capítulo