Capítulo 2: Revelaciones en la Oscuridad (Prólogo)

En los recovecos de la noche, donde los límites entre la vigilia y el sueño se desdibujaban, Aiden se encontraba inmerso en un trance profundo.



Una figura enigmática, envuelta en un halo de grandeza y misterio, se erguía ante él como un faro en la oscuridad, atrayéndolo hacia un destino aún desconocido.

Noche tras noche, la presencia de esta figura misteriosa se volvía más palpable, sus palabras resonaban en la mente de Aiden con una persistencia inquietante.



Sin embargo, al despertar, apenas podía recordar los detalles de sus encuentros.

Solo quedaba una sensación vaga de urgencia, como si el universo entero estuviera susurrándole al oído, instándolo a trascender sus propios límites.



En el seno de la familia noble de los Evershade, las sombras de la traición y la intriga se extendían como un velo oscuro sobre cada paso que daban.



En un mundo donde el poder y la influencia lo eran todo, la lucha por alcanzar niveles más altos de cultivo interno era una batalla constante, una contienda sin fin por la supremacía y el dominio.

Los Evershade eran maestros del engaño y la manipulación, moviéndose con la destreza de depredadores en un campo de presas.



En el corazón de la familia, el patriarca, Lord Evershade, reinaba con puño de hierro, urdiendo cada movimiento con meticulosidad para asegurar la posición de su linaje en la jerarquía del poder.



Los niveles de cultivo interno se erigían como la moneda de cambio en este juego de intrigas, determinando el estatus y la influencia de cada individuo.



Desde una edad temprana, los jóvenes nobles eran sometidos a rigurosos entrenamientos, aprendiendo las artes del combate espiritual y la manipulación de la energía vital que fluía a través de sus cuerpos.



Para Aiden, este mundo de maquinaciones y traiciones era una cárcel dorada, una prisión de oro que lo ataba a una vida de falsedad y engaño.



Sin embargo, mientras observaba el sombrío panorama que se extendía ante él, una chispa de determinación ardía en lo más profundo de su ser.



Aunque aún no comprendía por completo el significado de las visiones que lo asaltaban en la oscuridad de la noche, sabía que debía continuar adelante, enfrentando las corrientes oscuras que amenazaban con arrastrarlo hacia la desesperación.



En un mundo donde las sombras se alzaban con avidez para devorar la luz, Aiden se preparaba para enfrentar los desafíos que se interponían en su camino.

Mientras la familia Evershade tejía sus redes de engaño y traición, el joven noble se aferraba a la esperanza de un futuro donde la verdad y la justicia prevalecieran sobre la oscuridad.

Fin del capítulo