Los últimos 7 días

Los dos tenían muchas expectativas en poder terminar la última prueba, por lo que se prepararon durante los días que tenían que cumplir. Ahora estaban tratando de reunir alimentos cerca de su refugio para poder sobrevivir, fabricaron algunas herramientas ya que solo tenían un cuchillo, el cual Belford llevaba consigo durante todo el viaje.

Mientras hacían sus labores se hablaron el uno del otro de sus vidas, más y más sentían una atracción el uno del otro, quizá era por la situación en la que estaban o porque estaban se sentían unidos, fue que tal vez ambos se llegaron a gustar mutuamente.

─Belford... ¿dime como era tu vida en tu mundo...?

─emm... en donde empiezo... por lo regular trabajaba en algunos invernaderos dentro de la ciudad donde crecí, mi familia también tenía que cumplir una obligación que se les era asignado por cierto tiempo de vida; por lo regular a mí me gustaba leer e investigar sobre muchas cosas, sin embargo, siempre me intereso saber cómo fue que nuestra civilización casi se destruye. ¿Y dime como era la tuya?

─pues mi vida consistía en pescar y cuidar nuestros animales, además de hacer labores domésticas, no se mucho sobre nuestro mundo, pero sé que también paso por una catástrofe.

─y ahora los dos estamos aquí.

─si, tienes razón, y ¿qué debemos de hacer ahora? ¿Tendremos que esperar?

─si, aunque también debemos de estar preparados, tendré que hacer una lanza o algo para defendernos por si algo llegara a ocurrir

─por cierto... ¡necesitaremos comida si es que nos llega a faltar! Dime, ¿quieres que busque comida?

─pues no estaría mal, solo. Ten cuidado.

─ ¡si por supuesto!

Elina se comportaba con más confianza y se mostraba menos tímida que al principio. Después de esa conversación Elina se puso a buscar comida, mientras que Belford fabricaba algo con lo que se pudieran defender en caso de que algo los atacara.

6 días pasaron, ambos se sentían atraídos mutuamente y se mostraban de mejor manera, al igual se mostraban bastante cariño hacia ambos. Ya para el atardecer se sentaron a hablar sobre lo entusiasmados que se sentían, también estaban un poco nerviosos; ante posibles problemas y otras circunstancias que pudieran presentarse.

─Belford...

─si ¡dime!

─que crees que pase mañana...

─no tengo idea, pero ya falta solo un día.

─ ¿qué pasaría sí por ejemplo... nos dieran la oportunidad de volver?... ¡yo, no... la, quisiera tomar...!

─ ¡qué dices!

─porque yo quiero... quedarme contigo...

─ ¿quedarte conmigo...?

─si, ya no quiero regresar a un mundo donde no este junto a ti... ¿tú que harás si te dan la oportunidad de volver?

─creo... que... por la naturaleza de tu pregunta respondería... ¡tampoco quiero volver si tu no estas!

─ ¡¡¡de verdad!!! es decir... ¿sería mejor estar los dos junto no?, aun que mañana sabremos qué es lo que sucederá en adelante, me alegra que esa sea tu respuesta.

─debemos de ir a dormir, necesitas descansar bien.

─ ¡ven y duerme conmigo!

─ ¿y quien cuidara por la noche?

─no hemos tenido ningún incidente todos estos días, creo que una noche que durmamos juntos no afectara.

─ ¡está bien! Tú, ganas.

─ven abrázame...

Esa noche los dos durmieron juntos con poca preocupación y muchas ansias de saber que pasaría por la mañana. 

La mañana ya había llegado. Los dos se habían levantado y se hablaron mutuamente.

─que bien dormí... oye Belford, ¡despierta dormilón! ya es de día.

─ ¿de verdad? Me siento muy cansado... ¿no podría dormir un poco más?

─bueno, como quieras, me prepararé para el día de hoy.

─está bien aún queda algo de tiempo, ¡eso creo...!

Elina estaba preparando algunas antorchas para este día, mientras Belford se quedó durmiendo, luego de un rato despertó y acompaño a Elina en lo que hacía.

─ ¿oye que haces?

─tome las fibras de las hierbas que recogiste para hacer una antorcha y estoy usando el aceite de ese árbol que encontramos como combustible. ¿Muy ingenioso verdad?

─pues si es muy creativo la verdad.

─ ¡verdad que sí! ¿Y tú que harás?

─preparar algunas cosas, mi mochila y quien sabe que más.

─ ¿no estas preocupado...?

─creo que hay que tomarlo con calma. De nada nos sirve desesperarnos.

─bueno eso sí.

─y no hay novedades todavía en la imagen, solo lo último que vimos hace 7 días.

─ya veo... que harás entonces.

─esperar.

Así llegaba la tarde y ambos se juntaron para esperar cerca de su refugio. Belford se sentó y Elina se quedó de pie mientas caía el atardecer y justo antes de que se ocultara el sol, la imagen se les presento.

─pero si es...

─la imagen...

"felicitaciones, han completado con éxito la prueba de iniciación"

"sean bienvenidos a Greifeld"

Justo frente de ellos apareció una pequeña piedra ovalada de color blanco azulado, los dos estaban muy sorprendidos. Ambos decidieron tomarla y en su imagen de luz se figuraron algunas palabras.

"Primer recurso alcanzado"

"cualidad: empleo del aura"

─que significa Belford...

─ ¡no sé qué ocurrió! ¿primer recurso alcanzado? ¿empleo del aura?

─ ¿no aparece nada más? ¿No hay? Eso quiere decir que no nos dejaran volver...

─no tengo idea... que es... (Belford reacciono como si hubiera visto algo inquietante y su corazón comenzó a latir fuerte; se trataba de un grave problema)

¡ahhhhh...!

Belford se había dado cuenta de que detrás de Elina estaba una criatura enorme a varios metros de ella, tenía el aspecto de un reptil de más de tres metros y con 4 patas, ni siquiera escucharon en qué momento apareció, tal vez por el ruido del rio que se encontraba cerca, quizá estaban muy distraídos, o la criatura fue muy sigilosa, la criatura además parecía hambrienta.

Belford se quedó mudo por unos segundos y solo miro fijamente a esa criatura. ─bel... le dijo Elina al no saber que estaba pasando, trato de darse la vuelta y saber que estaba mirando Belford, ni siquiera entendía que ocurría, pero empezó a sentir mucho miedo en ese mismo instante. La criatura se acercó extremadamente rápido a Elina dirigiéndose a su cabeza, abrió su boca y la atrapo.

─ ¡¡¡AAaaaAAAAaaaaA!!! un grito de Belford, desgarrador lleno de ira y mucha tristeza se escuchó. Belford buscó una de las lanzas que tenía a la mano mientras veía caer el cuerpo de su amada al suelo. Tomo la lanza y con mucha fuerza se dirigió directo al ojo de la bestia. había conseguido dar en su objetivo; la criatura grito por el dolor, jadeo hacia el frente donde se encontraba Belford. La criatura lanzo zarpazos y coletazos, un coletazo golpeo a Belford a la altura del hombro lo que posteriormente lo lanzo a más de tres metros hacia unas piedras y cayo por una fisura cubierta por vegetación, la fisura tenía 2 metros de profundidad, aquel golpe podría haberlo matado, sin embargo, solo lastimo fuertemente.

Belford cayo en aquella fisura, mientras, se podían escuchar los gritos de la criatura que trataba de quitarse la lanza del ojo. Belford estaba muy lastimado y la caída había empeorado su estado, sin embargo, aun podía moverse y.… ahí estaba... unos guantes en un montículo de piedras, a un lado una espada cubierta de musgo. No lo pensó ni un momento, se puso aquellos guantes y tomo la espada, en el momento en que tomo aquellos guantes dejo de sentir dolor y comenzó a tener más fuerzas, aquellos guantes le llegaban casi hasta el codo y aun con mucha tristeza se armó de valor a enfrentar la criatura. Escalo fácilmente en la fisura y salió rápidamente de ella.

─ ¡heyyy! Monstruo...

La criatura que aún estaba tratando de quitarse la lanza clavada en su ojo, se fijó en aquella persona que le había lastimado.

La criatura trato de atacar muy rápido, sin embargo, Belford podía esquivarla con mucha facilidad, la criatura trato de atacarlo, pero Belford se movía más rápido.

─no sé cómo, pero puedo moverme bien a pesar de haber recibido muchos golpes.

Al querer atrapar a Belford, él pudo cortar limpiamente la pata delantera derecha del animal, un grito de aquella bestia se pudo escuchar.

─ ¡si...! Pude herirlo. ¡ahora... podre matarlo!

A pesar de que la criatura podía moverse estaba mal herido, la criatura no podía defenderse más pero Belford no quería tomarse más tiempo en matarlo y en un solo segundo corto su cabeza. Belford había matado a la criatura.

─ ¡¡¡muereeeee!!! ¡¡¡ahhhhhh!!!

Solo lo miro por un segundo, la criatura que momentos antes había arrancado la cabeza de la persona que amaba se encontraba sin vida. Se dirigió con mucha frialdad hacia su estómago, donde rajo todo el estómago hasta sacar la cabeza de Elina.

Una vez saco su cabeza se agacho y se hecho en llanto. Que más podía hacer, una profunda tristeza se apodero de él, no sabía que más hacer.

Con mucha tristeza se dispuso a cavar un hoyo que le tomo más de una hora con esa espada con forma de cuchillo ancho y grande que había encontrado. Posteriormente limpio con agua el cuerpo de Elina el cual yacía en suelo junto a su cabeza, Belford la coloco junto a su cuerpo luego de sacarla del estómago del animal.

No podía evitar llorar cuando la veía, se sentía culpable de que algo así ocurriera, tomo la manta con la que habían dormido juntos y envolvió su cuerpo, lo puso en el hoyo que había preparado, ahí también coloco su cabeza en la posición que debería ocupar. Sepulto su cuerpo y coloco muchas rocas que había sacado del rio.

Cansado y triste, durmió a un lado de un árbol sin que algo más le importara, quizá no le importo que otra criatura lo atacara.

A la mañana despertó con un rostro desolado pues nuevamente estaba recordando lo que había pasado. Se puso de pie y se dirigió a donde había sepultado a Elina; nuevamente se echó a llorar.

Fin del capítulo