Estaba poseído por una novela de harem +19, también estaba en el cuerpo de Isabella, una mujer malvada que atrae a cualquiera a la cama cada vez que se acaricia el cuello. ¡Morirás si vives así! Como si estuviera cuidándome para cambiar el final de alguna manera, seguía enredándome en cosas no deseadas y, como último recurso, hice algo que la chica malvada Isabella nunca haría. Por ejemplo, salvar a un niño de un mercado de esclavos. —En realidad soy una mujer casada, él es mi bebé. Sin embargo, el niño crecería unos años más tarde y sería el perro leal de una mujer que al final me mataría. *** —La vida que salvaste Isabella, responsabilízate. Solo porque lo salvé, este niño trató de renunciar a todo sin miedo. Acaricié su cabello como si estuviera en un aprieto. —Cuando crezcas. Si quieres pagarme, sé bueno conmigo. —Yo prometí. —¿Qué? —Cuando vaya allí, acepta mi elección por completo. No finjas que no lo sabes. Dije esto para aliviar la carga de mi mente, pero sus ojos eran inusuales. En la ceremonia de la mayoría de edad, los ojos de Noah, quien creció más allá del reconocimiento, no eran familiares. —Todo lo que puedo darle a Isabella soy yo. Noah me miró con sus ojos ardientes ya que no podía hablar mientras me besaba en una posición baja. —No estás decepcionada, ¿verdad? Incluso si malinterpretó el significado de la piedad filial, parecía estar completamente equivocado. ¡No, no me refiero a este tipo de piedad!