Nuestro protagonista se masturbó tanto que ascendió al Cielo, y renació como Héroe en otro mundo, donde una Diosa le dio la habilidad de convertir el semen en una poción como premio a la asistencia perfecta en masturbación y eyaculación. Se dice que la poción cura cualquier herida e incluso potencia a los demonios. Las mujeres, tanto humanas como demoníacas, acuden a su entrepierna pero... Una historia de reencarnación en un mundo diferente, donde te conviertes en un guerrero con tu entrepierna.