Descargar
https://es.novelcool.com/novel/original/id-246857.html
Siguiente >>
https://es.novelcool.com/chapter/Cap-tulo-1/11373632/

Capítulo 2

Después de caminar por aquel trayecto pude llegar a las murallas y al oír detenidamente, logré apreciar cierto bullicio de personas y algo de música desde un violín al parecer.

Me vi forzado a caminar y rodear la gran pared para hallar la entrada, su tamaño es aproximadamente unos ocho metros; obviamente no podría pasar sobre ella.

No tardé en ubicar la entrada dónde un par de sujetos con vestimentas y armas, comparadas con la edad medieval, estaban de pie custodiando la entrada. No podía negar haber visto aquella moda en películas de castillos y dragones.

Me aproximé y saludé con un buenos días para pasar desapercibido, pero ambos cruzaron sus lanzas bloqueando la entrada. Me miraron con el ceño fruncido y uno de ellos me dijo que no podía entrar con un tono agresivo.

-¡¡Sólo pueden ingresar los habitantes del reino de Moren. Incluyendo a ciertos extranjeros y sanadores!! -me dijo de golpe. Me pareció curioso el término "reino de Moren" pero salir de aquella duda no era mi prioridad.

-Disculpe señor. Caminé toda la mañana buscando alguna ciudad, pues estoy completamente desorientado. Por eso necesito buscar información para volver a casa -le dije, tratando de hallar misericordia en ese frío corazón.

Aún mantenía la esperanza de volver a casa, por más desolador que se veía mi búsqueda no renunciaría a ella.

El ceño de aquellos hombres seguía fruncido y sin vacilar, luego retomaron la postura inicial con el cual los encontré, y sus miradas cambiaron de dirección hacia el horizonte.

Me ignoraron como si fueran parte de las murallas, haciéndome sentir un estúpido que mendiga piedad, pero no les iba a regalar mi dignidad e insistí nuevamente aproximandome a ellos.

El de apariencia más ruda me tomó por la camisa, luego me dijo que me fuera a mendigar a otra ciudad, tras ello, me empujó haciéndome caer y rodar un par de metros, obviamente no sentí ningún dolor por ello.

El otro guardia sacó una tortilla de su bolso y me la lanzó, quedó impregnada de polvo tras caer al suelo pero de todos modos seguía siendo comestible, así que la recogí mientras me levantaba.

Sabía que no sería fácil pasar a tal "reino" como ellos mencionaron, menos esperar un gesto piadoso por parte de aquellos sujetos. Pensé en una solución la cual podría ser una apuesta, ya sabía las cualidades que pondría en juego.

Caminé con cautela, levantando las manos en señal de paz, pues una segunda expresión de violencia por parte de aquellos hombres podría ser mi muerte. Y al atraer la atención de ellos hablé de forma segura y concreta, debía demostrar seriedad en lo que me estaba jugando.

-¡Hagamos una apuesta! Si les demuestro tener una resistencia mayor a la de ustedes me dejarán pasar -les dije con mucho ánimo.

-No nos hagas reír mocoso, con ese escuálido cuerpo con suerte esa tortilla te mantendrá vivo por dos días -me dijo precisamente el guardia quien me lanzó la tortilla.

-Les aseguro que puedo estar en este mismo lugar por tres días, sin comer ni beber y una cosa más, no dormiré en estos tres días.

Fui enfático en cada palabra para así recuperar algo de respeto, pero sólo saqué un par de carcajadas de esos guardias, lo cuál ayudó a cruzar algunas palabras sin la violencia.

El sujeto que me lanzó a rodar detuvo su carcajada, me miró nuevamente con el ceño fruncido y me dijo que aquello es imposible.

-Con el frío de la madrugada tu muerte es segura. Además, no tengo la intención de cavar un agujero para enterrarte mocoso -me dijo con una sonrisa burlona.

Les aseguré que el frío no sería un impedimento para mí, y que era capaz de culminar la apuesta sin sufrir daño alguno.

Ellos se miraron intrigados por mis palabras, y el guardia que me lanzó la tortilla me dijo que no están dispuestos a seguir mis juegos y que si yo mostraba indicios de debilidad, el mismo cortaría mi cabeza.

Aquellas palabras me causaron escalofríos a pesar de saber que no perdería, pues una fuerza desconocida en mi interior me daba la confianza para llevar a cabo todo lo que me propusiera.

Les dije que tenían el derecho de cortar mi cuello, pero si yo ganaba la apuesta, ellos permitirían mi paso hacia el interior de la ciudad.

Me aproximé a ellos y les extendí mi mano para cerrar el trato, ellos a su vez vacilaron en estrecharla, pero al fin cedieron a mi petición, escupieron en la palma de sus manos para luego estrechar la mía, lo que me pareció bastante asqueroso.

Me dijeron que mantenga la tortilla para así tener una prueba de mi resistencia, aunque creo que lo hicieron con el fin de tentar mi apetito, aunque no dudaría en mi determinación, les demostraría que soy capaz.

Me extrañaba el hecho que mencionaron sobre la tan estricta entrada, pues sólo los habitantes del lugar, extranjeros y sanadores, les estaba permitido ingresar. Supuse que algo así no es bueno para la economía de una ciudad. Les pregunté por ello y me dijeron;

-Sabemos que hay una enfermedad mortal en otros reinos, por tanto existen órdenes estrictas con respecto al ingreso de la ciudad -me dijo el guardia que me lanzó la tortilla.

Les dije que mi cuerpo estaba completamente sano, pero ellos me negaron moviendo la cabeza de un lado a otro. Aquello me hizo dudar si realmente cumplirían con su parte del trato pues, no creo que pongan sus pellejos en juego para darme paso al interior de la ciudad.

Caminé un par de pasos hasta llegar a una gran roca, sin alejarme mucho de ellos. Sobre la roca dejé la tortilla, y luego de aquello me dispuse a demostrar las cualidades que había descubierto en mí.

Con una pequeña piedra marqué una línea en la tierra para luego marcar otra cincuenta pasos más allá, con ello tendría un tramo para correr lo suficiente, sin alejarme tanto de aquellos hombres.

Me dispuse a correr por varias horas sin detenerme, algo que para mi fue bastante fácil. También hice bastantes flexiones de brazo y utilicé como saco de boxeo aquella roca en donde estaba la tortilla.

Mi resistencia era increíble, mis puños no sangraban y tras los golpes que di, unas fisuras comenzaron a formarse en la roca, pensaba que con esto tendré el respeto por parte de los guardias que me miraban detenidamente.

De momento a otro dudé en continuar con mi demostración de resistencia, pues tal vez ellos poseen las mismas cualidades que yo tanto trataba de lucir pensé, pero descarté la idea tras escuchar que el turno de guardia estaba por culminar.

Eso significa que tenían la necesidad de comer y dormir, además debían descansar. No es por presumir pero esa palabra ya no estaba en mi vida.

Al anochecer llegaron otro par de guardias, estos fueron informados sobre mí presencia al parecer, así que tendría toda la noche nuevos observadores que por cierto, venían bastante más abrigados que los anteriores guardias.

Aproximadamente a la media noche, ambos guardias rodeaban una fogata que ellos mismos encendieron, pues el frío se volvió más denso y la velocidad del viento aumentó como si una tormenta se aproximara. Pero no fue así, sólo el frío se hizo sentir y no me afectó en lo absoluto, por tanto me senté sobre la roca junto a la tortilla a mirar las estrellas hasta el amanecer.

Fin del capítulo

Informe
<<Prev
Siguiente >>
Alexxius
Donar
Catalogar
Ajuste
Fuente
Arial
Georgia
Comic Sans MS
Tamaño de la fuente
14
Antecedentes
Informe
Donar
Oh no, este usuario no ha configurado un botón de donación.
English
Español
lingua italiana
Русский язык
Portugués
Deutsch
Éxito Advertir Nuevo Se acabó el tiempo NO Resumen Más detalles Por favor califique este libro Por favor escribe tu comentario Respuesta Seguir Seguido Este es el último capítulo. ¿Estás seguro de eliminar? Cuenta Le hemos enviado un correo electrónico con éxito. Puede consultar su correo electrónico y restablecer la contraseña. Has restablecido tu contraseña con éxito. Vamos a la página de inicio de sesión. Leer El tamaño mínimo de tu portada debe ser de 160 * 160px El tipo de portada debe ser .jpg / .jpeg / .png Este libro aún no tiene ningún capítulo. Este es el primer capítulo Este es el último capítulo Vamos a la página de inicio. * El nombre del libro no puede estar vacío. * El nombre del libro ha existido. Al menos una foto Se requiere la portada del libro Introduzca el nombre del capítulo Crear con éxito Modificar con éxito No modificar Fallar Código de error Editar Borrar Sólo ¿Estás seguro de eliminarlo? Este volumen todavía tiene capítulos Crear capítulo Doblez Eliminar con éxito Introduzca el nombre del capítulo ~ Luego haga clic en el botón 'elegir imágenes' ¿Estás seguro de cancelar la publicación? La imagen no puede ser menor de 300 * 300 Ha fallado El nombre no puede estar vacío El formato del correo electrónico es incorrecto La contraseña no puede estar vacía Debe tener entre 6 y 14 caracteres Verifique su contraseña nuevamente