Capítulo 1

Crecí en una casa alejada de la ciudad, vivía con mis padres y mi hermana mayor, en una casa en el campo, mi vida era buena no tenía di idea de lo difícil que sería mi vida, bueno complicada.

Bueno empezemos por donde todo se torno tan poco amigable, era un día muy caluroso, tremendo, yo jugaba en el patio de mi casa con mi perro roki.

-malia-escuche decir a mi padre llamarme desde el balcón de la casa.
-si padre-dije limpiado me el vestido después de estar en el suelo jugando.

-va a venir un amigo mío, con sus hijos por favor cambiante y comportarte ellos vendrán más seguidos así que ha amigos, necesito enserio que te comportes. - dice el mostrando un sonría de media

-si padre-dije.

- no diga si padre que fue lo que te enseñe-en narca un ceja.

-si señor-dije con una sonrisa forzada.

Al a ver dicho eso desapare en el balcón.

Mire a mi perro que me miraba incrédulo, comenze a caminar a mi habitación, claro a cambiarme, odiaba cuando venían personas a la casa siempre con intenciones de obtener el favor de mi padre ya que el siempre lograba todo lo que quería, se ahogaba de dinero, y era algo que en ese entonces no me preguntaba ¿que trabajo hace mi padre? Fui estúpida al pensar que era un siempre oficinista,bueno dejemos de adelantar las cosas y continuemos. Me cambié y fui directo a la sala donde se encontraba mi madre con mi hermana que estaba preparado la comida para las visitas.

-oh malia estas hermosisima-dice mi madre limpiandose las manos en el delantal para después te tocar mi rostro y dándome su mejor sonrisa.

-¡MAMÁ¡me estas arrugado la cara, me vas a colocar más vieja de lo que me estoy convirtiendo.

Mi mamá se deteniene de acariciarme la cara y me mira con una expresión de preocupación.

-quién te dijo que esto de volvía vieja, fue camila, eh camila deja de meterle cosas a tu hermana. - mi mamá acusan a mi hermana qu ella cual me miraba con ojos de burla.

-no, no mami lo leí en un libro, cami no me dijo nada, ehh cami no te rías.

Mi hermana tenía una de esas sonrisa contagiosas que le quedaban tan bien, ella era la mejor hermana para mí bueno no voy a negar que teníamos nuestros conflicto pero en momentos difíciles ella me apoyaba.

Se sentía un ambiente muy agradable en ese entonces, me sentía muy bien, no complicaciones, no Estres.

Mi a mi padre bajar las escaleras arreglandose su cobarta.

-ya están llegando, comportences.- dice el dirigiéndose a hacia dónde estaba mi mamá, le da un beso en la boca.

-chicas por favor no me haga pasar vergüenza-dice el, al que nosotras a sentimos con la cabeza.

No les Voy mentir mi vida antes no era mala pero sentía un tanto de odio por mi padre, no lo odiaba digamos que me parecía horrible.
Unos minutos después tocan la puerta a lo que mi madre la abre, se ven un hombre , una mujer y dos jóvenes, mi vista se centra en los jóvenes que en ese momento me sentí muy curiosa de los dos jóvenes guapos ojos azules y cabellos rubios no parecían reales, bueno se notaba que no eran de este país su apariencia era de chicos de ciudad.

-oh hombre te ves muy bien, y por lo que veo viniste con toda la familia, es un placer señora micaelis-dice mi padre acercándose a la mujer y dándole un estrecho apretón de mano , sus ojos se encuentran a lo que la mujer se sonroja, bueno no la culpo mi papá es guapo.

-ah perdón william esta es mi familia, mi esposa Adnis, mi hija mayor Camila y mi pequeña Malia-me da un apretón de hombros al llegar a mi, los chicos a los cuales no se había dignado a mirarme me miran y pasan a ver a mi hermana, sentí un cosquilleo que recorrió mi cuerpo al momento en donde nuestros ojos se encontráron fue por poco tiempo pero causó un efecto en mi raro en ese entonces no pensé que seria tan malo y que fuera el comienzo de mi complicada vida

-robert tus hijas son muy lindas, bueno mi esposa Lisa ya la conoces, mi hijo mayor Austin, y mi hijo menor August,-dice este.

Mi padre le un aviso con la mano para que pasen a la sala.

-bueno cuéntame no tuviste inconvenientes al venir-dice mi padre sentándose en un Sofá.

-No fue todo muy tranquilo.

-bueno ya que estamos aquí que tal si vamos al grano, las mujeres y los niños se pueden ir conociendo. - dice mi padre, en ese momento me pareció muy raro ya que mi padre no actuaba tan precipitadamente ante una visita, el siempre habla en la sala un largo tiempo y después se iba a su oficina pero esto es nuevo.

A lo que el hombre asiente con la cabeza mira a su esposa y se dirige en dirección a la oficina con mi padre.

Un silencio incómodo lleno la sala, nadien hablaba ni mi mamá a lo que ella siempre habla pero está vez no, era como si no se sintiera bien.

-bueno.. Señora lisa me gusta su vestido - dice mi hermana rompiendo el silecio.

-oh gracias querida, me encanta igual el tuyo de parece a una modelo de una revista que estuve leyendo hace unos días-dijo aquella mujer sonriendo.

-a, gracias me halaga - dice mi hermana.

-adnis mi esposo me contó que haces la mejor tarta de sanahoria, me gustaría saber si me daría el secreto, desde el día que mandaste ese regalo mi esposo y a mis hijo les encanto, dime cual es tu secreto-dice la mujer sentándose al lado de mi madre.

-oh no creo que es mucho amor - mi mamá sonríe forzosamente-pero si quieres yo te daré la receta-dice.

-si por favor-la mujer le da un vistazo a mi hermana - camila cuéntame tienes novio para tu edad yo ya tenía pretendientes-dice

- bueno no, estoy centrada es mi estudios pero si tengo pretendientes pero no le diga a mi padre me los asustaras-a lo que la mujeres se ríen y mi hermana me sonríe.

-oh querida mi boca está cerrada, pero sabes aquí tengo a dos hijos solteros, dispuestos a tener una señorita como tu-dijo la mujer, a lo que los jóvenes miran a mi hermana sin sorprenderse, tenían una mirada audaz, de verdad son guapos esos ojos azules y su ropa los hacía ver más mayores pero para bien, tenían su cabello hacia atrás pero si movían la cabeza ese se pasaba al frente.

-señora lisa no promocione a su hijos deje que los jóvenes decidan-dice mi madre riéndose, se nota a que el ambiente se relajo.

-madre.. - dijo uno de los chicos, su voz era gruesa me dio una corriente en el cuerpo - aún que la señorita camila podría ser una candidata perfecta con todo respecto señorita camila no estoy interesado en usted-dice este.

-¡Austin! Por favor - la señora lisa se le elimina la sonrisa al escuchar decir eso de su hijo como si no lo hubiera escuchado bien, en cambio mi hermana y mi mamá sonrían a lo bajo, una leve risa se me escapó que captó la atención de todos.

-lo siento,no era mi intención-dije.

-oh no se preocupe señora lisa, a mi tampoco me interesa su hijo con todo respecto joven austin, estoy centrada en mis estudios.

-querida yo-dice la señora pero la interrumpe el el chico austin.

-Pero me interesa su hija menor, captó mi atención desde el principio. - mi corazón comenzó a latir como si lo que acababa de escuchar era una broma, me era nuevo estas sensaciones estrañas, pero no para mal si no que me atraían más. Toda la sala se quedó en silencio.

-señorito austin es directo-dijo mi madre sonriendo-pero mi hija menor no está disponible aún es muy joven para usted-mi mamá intenta actual normal.

-está bien señora adnis, soy paciente-dijo el dirigiendo su mirada a mí, a lo que yo respondí mirado a otro lado.

Mi hermana rompe en risa,agradable como cambia el ambiente ella.

Me sentía muy rara, mi respiración se sentía entre cortante, y mi cuerpo reacciona como si estuviera afectado por alguna enfermedad.

-Ma, madre-dije-puedo retirarme no me siento bien.

-por supuesto hija mía, puedes tomarte una pastilla para la gripe depronto estas resfriada-dice mi madre levantándose de la silla y se dirige a hacia donde estoy yo, toca mi frente y me sonrie.

-con permiso, me retiro-dije antes de dejar la sala. A lo que salí me sentía mucho mejor, mi respiración volvió a su estado natural, me fui al patio, senté en una banca y mire a mi lejos, me puse a pensar si esto era normal,buscaba una respuesta a la que no llegaba a mi mente.

-te hice sentir incomoda señorita malia- me sorprendió el joven austin, como llegó aquí.

-oh no, disculpe mi mala educación, no sólo no me sentía bien-dije.

el se sienta al lado mío.

-entiendo señorita, perdón por mi tan mala educación, por lo imprudente que fui-dijo mirándome a los ojos.

-joven austin, no tengo porque perdonarlo, no me ofendió ni nada, creo que me sentí halaga - dije

-oh que bien , señorita¿cuantos años me coloca? -dijo.

-15 o 17 joven - dije sin dudar.

-17 señorita, tengo 17 años-dijo mirandome de arriba de abajo.

-¿y usted a mi? - pregunte.

-bueno, bueno viéndola tiene un buen físico y podría ser 17 a 18 - dice.

-tengo 16 años, me veo tan mayor - le dije riendo.

-como cree, solo supuse-dice el-señorita¿ puedo llamarla Malia?.

Me sorprendió su pregunta, es algo que no se pregunta sino que lo dices y ya.

-por supuesto, me imagino que yo te puedo llamar Austin - dije

-Claro,Malia ¿puedo ser tu amigo? , tu madre, disculpa nueva mente mi intromisión, me contó que como estudias tu en casa no ah tenido la oportunidad de socializar con personas, me gustaría ser la primera persona que sea tu amigo, y vengo con beneficios-se ríe - te ayudaré en tus tareas. - a lo que yo misma sin darme cuenta reí como estúpida y acepte, gran error malia, tus problemas apenas comienzan.

Fin del capítulo